La importancia del nombre

Por: Carlos Andrés Naranjo-Sierra
Cuando va a nacer un hijo, una de las labores a la que dedicamos más tiempo, es la elección del nombre. La mamá saca una lista de nombres de niños y el papá una de nombres de niñas; los tíos opinan, los abuelos también y finalmente papá y mamá toman una seria decisión, pues saben que ese nombre será la identificación permanente de esa nueva persona.

Sería tonto pensar que el nombre es algo sin importancia. ¿Por qué entonces, se toma tan a la ligera la elección del nombre en los negocios?. Se ha vuelto común ver tiendas llamadas “tienda sin nombre” o con iniciales como “KPF” o “RPN” que finalmente vienen a ser lo mismo que no tener nombre, pues el significado de estas iniciales sólo las conoce el dueño del local y su familia y no el cliente que es quién necesita saber el nombre para identificar mentalmente el negocio.

A menos que se tenga toda la plata del mundo para por medio de la publicidad explicarle a la gente que significa “RPN” o cualquier otro nombre extraño, uno debería escoger para su tienda un nombre que desde que se pronuncie, hable de la función del negocio, de su diferencia y que sea registrable. Debe ser claro, sencillo y provocativo. Que no haya que hacer esfuerzo para entenderlo o memorizarlo como los de aquellos niños llamados Egesell o Usnavy.

Las PYMES en Colombia

1. Clasificación
En Colombia, según la Ley para el Fomento de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa, Ley 590, las PYMES se clasifican así:

Microempresa: Personal no superior a 10 trabajadores. Activos totales inferio res a 501 salarios mínimos mensuales legales vigentes

Pequeña Empresa: Personal entre 11 y 50 trabajadores. Activos totales    mayores a 501 y menores a 5.001 salarios mínimos mensuales legales vigentes.

Mediana: Personal entre 51 y 200 trabajadores. Activos totales entre 5.001 y 15.000 salarios mínimos mensuales legales vigentes.

El aporte de la micro, pequeña y mediana empresa industrial se refleja en estos indicadores:

La Encuesta Anual Manufacturera nos permite valorar la incidencia de  la MIPYME en el panorama empresarial colombiano. Representan el 96.4% de los establecimientos, aproximadamente el 63% del empleo; el 45% de la producción manufacturera, el 40% de los salarios y el 37% del valor agregado. Son más de 650.000 empresarios cotizando en el sistema de seguridad social.

En cuanto a productividad no se tienen datos en ACOPI.

La distribución geográfica de  las unidades, establece que la PYME en términos generales sigue la misma  tendencia del total de  la industria manufacturera y reúne prácticamente el 70% en los cuatro (4) principales centros productivos:  Cundinamarca–Bogotá, Antioquia, Valle y Atlántico.

2. Principales sectores
En cuanto al desarrollo sectorial de la PYME, se observa la gran concentración de la industria en aquellos segmentos basados en el aprovechamiento de los recursos naturales, tanto de origen agropecuario  como minero. Este grupo de sectores representa el 71% de la producción industrial. Si excluimos  la refinación de petróleo y la industria petroquímica, la manufactura basada en el aprovechamiento de los recursos naturales  representa aproximadamente el 60% del total industrial.

Los principales sectores son: Alimentos, Cuero y Calzado, Muebles y Madera, Textil y Confecciones, Artes Gráficas, Plástico y Químico, Metalúrgico y Metalmecánico, Autopartes y Minerales no Metálicos.

3. Número de establecimientos
Según datos de Confecámaras, en el 2001 existían en Colombia 43.242 pequeñas empresas y 8.041 medianas.

Según el DANE, Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas, en su primera encuesta nacional de micro establecimientos de comercio, servicios e industria realizada en el último trimestre de 2001, en el año 2000 en Colombia existían 967.315 micro establecimientos, de los cuales el 58% estaba en el comercio, el 30 por ciento en servicios y el 12.5 por ciento en la industria.

Durante ese periodo, los micro establecimientos generaron 1.094.755 empleos, lo que sería equivalente a 1.1 empleos por establecimiento.

La relación de empleo por establecimiento es del 1.8 por ciento en el sector comercio, 2.8 por ciento en la industria y 2.5 por ciento en los servicios.La encuesta señala también que en el 2000 existían alrededor de 7.600 establecimientos industriales con más de 10 trabajadores y 120.785 microempresas.

En el comercio, los establecimientos con más de 20 trabajadores totalizaban 3.832, ocupaban a 215.818 personas y realizaban ventas por 40.2 billones de pesos. Los micronegocios con no más de 10 trabajadores eran 558.000, generaban 556.775 empleos y registraban ventas de 8 billones de pesos.

Microestablecimientos y Empleo

Sector Establecimientos Trabajadores
Comercio 557.759 630.267
Servicios 288.771 381.328
Industria 120.785 156.653
Total 967.315 1.168.248

4. Participación de las pymes en las exportaciones
Dentro de este sector las más pequeñas registraron el mayor crecimiento exportador. Las PYME más pequeñas tuvieron el mayor crecimiento exportador en 2001, mientras que las más grandes del grupo fueron las de menor crecimiento.

En el 2001 las exportaciones de las PYME crecieron 10.2% en dólares. Esta variable mantuvo una tendencia creciente durante todo el año y en último bimestre cerró con una tasa de 5.6%. Los sectores con mayor crecimiento de las exportaciones fueron los de repuestos para automotores, hierro y acero, equipo profesional y científico, muebles, imprentas y calzado.

EXPOPYME
Con el propósito de alcanzar las metas establecidas por el actual Gobierno en el Plan Nacional de Desarrollo 1998 – 2002, PROEXPORT Y ACOPI acordaron realizar  el Programa EXPOPYME.

EXPOPYME es un programa dirigido a promover la adaptación de las PYMES colombianas a las exigencias de la economía mundial (globalización, competitividad y apertura al exterior), resultado de una concertación entre los gremios, el sector público, el privado y la academia.

Balance de expopyme
En 1999 las medianas y pequeñas empresas vinculadas a Expopyme exportaron 48.9 millones de dólares, en el año 2000 estas exportaciones se incrementaron en un 37%, hasta alcanzar los 67.1 millones. Pero lo mejor es que la tendencia continúa y en el primer semestre del 2001, 319 empresas del Programa han exportado 46.2 millones de dólares.

En el periodo comprendido entre enero y septiembre de 2001, más de la mitad de las exportaciones no tradicionales fueron realizadas por empresas atendidas por Proexport, que destinó en este periodo 7.486 millones de pesos para coinversión. Expopyme ha vinculado 1.680 pequeñas y medianas empresas, de las cuales 1.070 diseñaron su plan de exportación. 417 de las firmas evaluadas facturaron 49 millones de dólares en 1999, cifra que ascendió a 46 millones en el primer semestre del 2001.

Para el 2002, Proexport quiere vincular a 250 empresas pequeñas y medianas, con lo cual la cobertura del programa se ampliaría a 1.930 establecimientos industriales.

5. Ventas
Las ventas de la PYME en el mercado interno crecieron 1.3%. Fue así como, la pequeña recuperación del mercado interno propició que las ventas pasarán de crecer 0% en el bimestre septiembre – octubre, a 2.4% en el último bimestre, tasa superior a la de la gran empresa que fue de 2.1%.

Las ventas de la PYME DEL COMERCIO AL POR MENOR CRECIERON 3.7%. Este crecimiento se explicó principalmente por el crecimiento del comercio de alimentos, productos diversos, textiles, muebles y confecciones. De las 12 actividades analizadas para el comercio, 11 mostraron un crecimiento positivo en 2001. La evolución del comercio PYME depende en gran medida de lo que pase con el sector de alimentos, pues éste equivale a 37% del total de las ventas. Este sector creció 8% real en 2001.

Las ventas de la PYME de servicios crecieron 1.2%. Entre los sectores que registraron el mayor crecimiento están los de actividades financieras diferentes de las intermediación, (casas de cambio, bolsas de valores, comisionistas, etc), seguido de las actividades inmobiliarias, comunicaciones y los otros servicios. De las actividades con mayor participación dentro del total de servicios PYME (comunicaciones, sector financiero, hoteles y restaurantes) sólo las de intermediación financiera registraron una reducción real de -4% en sus ventas en 2001.  Sobresale en especial el crecimiento del sector de comunicaciones, cuyas ventas crecieron 10% real el año pasado. Este crecimiento puede explicarse en el aumento de la oferta de servicios de comunicación por Internet, cable y las estaciones de llamadas que han tomado fuerza en las diferentes ciudades.

6. Antigüedad
El promedio de antigüedad de las PYMES en Colombia es de 10 años.

7. Gastos en Innovación y Desarrollo
No es posible determinar con exactitud la inversión de las Mipymes en investigación y desarrollo. Vale la pena comentar que el presupuesto del estado para atender iniciativas en esta materia es prácticamente inexistente. No obstante Colciencias y el SENA vienen aplicando algunos recursos a estos programas.

8. Calificación de Calidad
Las Mipymes han avanzado en los últimos cuatro años muy positivamente en sus programas de certificación de calidad, en programas que han estado monitoreados por ACOPI. Aproximadamente 1.200 pequeñas y medianas empresas han logrado en los últimos cuatro años su certificación de calidad.

9. Financiamiento
El fondo Nacional de Garantías ha jugado un papel muy importante en el respaldo de los créditos de las Mipymes ante la banca comercial.

Se mantiene vigente la necesidad de conformar una verdadera Banca de Desarrollo para las Mipymes colombianas.

Fuente: Businesscol.com

Pymes: función antes que marca

Por: Carlos Andrés Naranjo-Sierra
La función principal de todo esfuerzo de mercadeo esta en relación con la creación de marca. Lo cual quiere decir que en TODO lo que se hace en una empresa, debe haber una idea clara de cual es el concepto que se quiere comunicar y en cómo cada acción ayuda o perjudica a esta construcción. Como quien arma un edificio buscando que cada ladrillo esté en perfecta armonía con el diseño propuesto por el arquitecto

Pero ¿Por qué entonces propongo hablar de función antes que marca? Pues muy sencillo. Porque generalmente en las pequeñas y medianas empresas la marca es  una desconocida, es apenas un retoño. Pocos consumidores la conocen y por consiguiente pocos de ellos preferirán comprar un producto por el respaldo que les ofrece este nombre.

Es por eso entonces, que propongo hablar de funcionalidad. ¿A qué me refiero con funcionalidad? A que se le cuente al cliente cuál es el beneficio que le ofrece ese producto o servicio, antes de contarle cuál es el nombre de la empresa que lo respalda. Hacer lo opuesto sería pecar de orgullo, tal como el deportista que apenas comienza a jugar de titular y ya quiere que todo el mundo le pida el autógrafo, mucho antes de demostrar en la cancha sus habilidades.

Primero demuestre que sabe manejar el balón y luego prepárese para los autógrafos. Primero demuéstrele al cliente cuales son sus cualidades y luego prepárese para que lo llamen por su nombre. Es un camino más sensato y menos riesgoso. Claro está que algunas veces el vendedor de una marca desconocida habla de ésta con tanta familiaridad y orgullo, que logra generarle al cliente la percepción de que es una gran marca. Pero ésto truco no dura mucho tiempo. Y hablar de marca es hablar de largo plazo.

Así que la próxima vez que quiera poner su logotipo gigante en un aviso, antes que una buena foto que demuestre las bondades de utilizar su producto o servicio, piénselo dos veces. A lo mejor esta desperdiciando su dinero solamente para alimentar su propio orgullo. Tenga paciencia, trabaje juiciosamente. Ya llegará el día en que con solo mencionar su nombre consiga generar negocios. Como dice el viejo y conocido refrán: «Cría fama y luego héchate a dormir»

La Pyme evoluciona

Las Pymes no han escapado a la transformación productiva del país y, aunque todavía subsisten problemas estructurales de productividad y competitividad, su esfuerzo en estos aspectos les permitió, en el último año, tener incrementos importantes en sus principales indicadores financieros. A esto se suman una serie de factores externos que les permitieron tener más trabajo y, por ende, crecer.

Por un lado, está el incremento de la inversión extranjera en el país que contrató un gran número de servicios periféricos a su actividad central, como servicios de personal, logística y transporte. Por otro lado, se encuentran las actividades relacionadas con la construcción, que se vieron beneficiadas gracias a la mayor inversión en infraestructura el año pasado. Resulta interesante observar que todas estas actividades son realizadas en su mayoría por Pymes. Por ejemplo, en transporte y construcción, más de la mitad de las empresas pertenecen a este segmento y, además, en 2007 registraron crecimientos anuales en ventas cercanos al 30%. Otro espacio para crecer fue el turismo, sector que se dinamizó en 2007 por cuenta de las mejores condiciones económicas y del aumento en la seguridad. En el caso de las Pymes, las cuales concentran el 85,3% de las empresas que se dedican al turismo y el 43% de las ventas generadas, dicho dinamismo les permitió un aumento en ventas de 23%. Adicionalmente, en estos sectores destacados se observa un crecimiento importante en la utilidad operacional, lo cual hizo que sus crecimientos en ventas fueran más rentables que en el resto de sectores. Pero sin duda, el crecimiento más rentable fue el de servicios de vigilancia y seguridad, ya que su importante crecimiento en ventas, de 44%, estuvo acompañado por un incremento impresionante de 274% en su utilidad operacional.

No obstante lo anterior, cuando se mira al agregado se observa que la Pyme, a pesar de sus esfuerzos, está lejos de la gran empresa en lo que respecta a rentabilidad. Esta conclusión se desprende de un análisis realizado por Dinero a las 27.541 empresas que registran sus estados financieros ante las entidades de vigilancia y control (Supersociedades, Contaduría, Superservicios, Supersubsidio, Acemi, Superfinanciera, Supersolidaria, Supertransporte, Supervigilancia y algunas empresas). El análisis clasificó a las empresas según su nivel de ventas. Por ejemplo, a la Pyme se la catalogó como aquella con un nivel de ventas entre $1.000 millones y $15.000 millones. Como primera medida, lo que se observa es que, si bien las Pymes constituyen el 44% de las empresas totales en Colombia, solo representan el 11% de los $509 billones que se vendieron el año pasado en el país. Por su parte, las compañías que venden más de $15.000 millones, son solo el 14,2% del total, pero hacen el 88,3% de las ventas y el 95,5% de la utilidad neta.

Al analizar por sectores, un hecho preocupante es el del sector agropecuario, actividad conformada en más de 70% por Pymes. Este tipo de empresas solo se están llevando el 24,1% de las ventas con un crecimiento de 6% en el último año, comparado con el de 17% de la gran empresa. Por su parte, la utilidad operacional registrada por la Pyme en este sector cayó en 83%, mientras que la de la gran empresa se incrementó en 55%. Otros sectores con un peso importante en ventas de la Pyme como turismo, autopartes, vidrio y servicios técnicos y profesionales se registraron como más rentables en la gran empresa que en la Pyme. Por ejemplo, mientras que en la Pyme el sector de turismo presentó un margen operacional de 7,2%, en la grande, este indicador ascendió a 16,1%. En contraste, computadores es el sector que, en comparación a la gran empresa, presenta la mayor rentabilidad en la Pyme, con un margen operacional de 6,7%, frente al de 2,7% de la gran empresa. El anterior resultado es bastante interesante si se tiene en cuenta que la Pyme tiene una participación en ventas en esta actividad de tan solo 2,8%.

Respecto a las ventas externas, la gran empresa también le lleva a la Pyme una gran ventaja. De las 27.541 empresas, solo hay 3.608 que exportaron en 2007 y, si bien el 55,7% se concentró en la Pyme, las exportaciones se le atribuyeron en un 72,8% a tan solo 81 empresas grandes. Además, los datos muestran que, de la Pyme, solo la mediana registró un crecimiento en sus ventas externas (5,8%). La pequeña las contrajo en 15,3%.

Por el lado del acceso al crédito, el sector financiero afirma que la Pyme le ha perdido el miedo al endeudamiento. A su vez, la encuesta de comportamiento y opinión Pyme del Cinset, Acopi y la Fundación Konrad dice que el crédito bancario siguió en 2007 ganándole participación al extrabancario. Sin embargo, los datos registran que el nivel de endeudamiento permaneció estable alrededor del 10%. Así, entre las más de 12.000 Pymes se concentra tan solo el 9,3% de las obligaciones financieras, mientras que en menos de 4.000 de las grandes empresas se concentra el 89%.

Los esfuerzos de la Pyme

Para Ricardo Lozano, director de Mipyme del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, hay una mayor preocupación por fortalecer la gestión gerencial y productiva con el fin de enfrentar el reto de los tratados comerciales que Colombia ha venido gestionando y a los requerimientos de competitividad del mercado local e internacional. En este sentido, se observa cómo la Pyme se ha venido profesionalizando, siendo consciente de la importancia de los estudios y de buscar asesoría para implementar estrategias que le permitan seguir creciendo. A su vez, las Pymes son conscientes del rezago tecnológico del que venían y hoy se percibe un esfuerzo para superar este obstáculo, así como el de la escasa innovación en los productos y servicios ofrecidos. Esto se refleja claramente en la Gran Encuesta Pyme de Anif, que muestra como principales preocupaciones de las Pymes capacitar al personal en necesidades como mercadeo y ventas y la formación en tecnología.

Sergio Clavijo, presidente de Anif y Carolina Gil, investigadora económica de Anif, resaltan que en los últimos años ha habido un giro importante en las necesidades de formación de las Pymes: «Muchas de ellas han virado de temas relacionados con el manejo contable y financiero hacia aspectos ligados a su transformación productiva. De otra parte, en los procesos de mejoramiento adelantados, la diversificación de mercados ha figurado como un campo de acción clave, así como la obtención de certificaciones de calidad y el lanzamiento nuevos productos».

Perspectivas

Ante los problemas de productividad y competitividad que enfrentan las Pymes, Norman Correa, presidente de Acopi, señala que desde el gremio -y con la ayuda del sector financiero y del Gobierno- se está promoviendo la transformación productiva, que consiste, no solamente en que algunas empresas que existen hoy lleven a cabo inversiones retrasadas en maquinaria y equipo, sino también, en ayudar a incursionar o migrar hacia nuevos sectores menos intensivos en mano de obra barata. «No tenemos nada que hacer en lo que respecta a ropa y zapatos, es decir, en actividades maquiladoras. Necesitamos incursionar en industrias que tengan que ver con servicios, como call centers», dice Correa. El Presidente de Acopi también advierte que hay que identificar vocaciones por región y no hacer esfuerzos individuales sino en conjunto. Por ejemplo, el Eje Cafetero tiene una gran vocación de ensamble de motocicletas, trayendo esto el desarrollo de las autopartes.

A pesar de que la informalidad ha bajado, sigue siendo uno de los problemas más grandes que enfrenta la Pyme, el cual se deriva de los altos costos que perciben al formalizarse, como impuestos y gastos de registro. Si la Pyme no supera esta barrera, es muy difícil que pueda crecer más y alcanzar un nivel de ventas significativo, ya que se le imposibilita exportar, no puede acceder al sector financiero, no se logra integrar en alguna cadena productiva importante y tampoco puede competir en eficiencia y rentabilidad con la gran empresa. Así que el reto continúa. Formalización e identificación de sectores con potencial parecen ser la clave.

Fuente: Dinero.com